Cuando vi a Elizabeth sabía que era para mi. Una mujer hermosa, divertida y «descomplicada», de esas que intimidan, y no sabia si acercarme o no… pero me atreví y desde ese entonces hicimos click. (literal, sí CLICK).
Quiero seguir a su lado todos los días de mi vida, y que ni la muerte nos separe con Elizabeth, porque nos queda mucho por recorrer juntos.
A nuestros familiares y amigos, los invito que nos acompañen y celebren con nosotros este día tan especial.